septiembre 12, 2006

Reseña en la columna Los libros del Capitán de Jorge Eslava

El Año de la Serpiente

Apenas setenta páginas que nos provocan más ganas, como dar pocas relamidas a una bola de helado de frambuesa. Porque a esa frutilla sabe este relato: agridulce, agradable, fresco. Concebido como un diario íntimo, hecho a trocitos confesionales y con la resistencia natural de configurar una trama. Porque el registro del diario acoge, desprevenidamente, las pasiones más sobresaltadas y la serenidad más pasmosa.
La protagonista se va de campamento a recibir el año nuevo. ¿Sola? Ni loca, acompañada de dos amigos. Ellos son unos afortunados, pues son sus amigos preferidos y con ellos emprende, sin proponérselo, un breve viaje por las reflexiones trascendentales de la metafísica adolescente. La salida a una playa es sólo un pretexto para un aprendizaje de la amistad, tal vez del amor. Dos grandes afectos que hacen la vida más bella e inalcanzable, como el cielo que miran tendidos en la arena durante ese decaimiento del año viejo. En aquella noche estrellada no hay ocaso de sol, pero sí luna nueva y es lo que Lucía nos ofrece en estas páginas —también ilustradas por ella— escritas para sí, pero que nosotros oteamos con la fruición del entrometido.

Jorge Eslava

1 comentario:

Circuit of Art dijo...

buen comentario por una obra que promete mucho y de las que vendran